.
Adrian Iaes
Como casi ningún otro músico de la escena del jazz, el pianista Adrián Iaies encarna el crecimiento exponencial del género.
Diez años atrás, tras desarmar el grupo Touch, tocaba los miércoles en Dr. Jeckill, en la calle Monroe, con Paco Weht en el bajo y Oscar Giunta en batería.
Probaba, por aquellas noches, una forma de aproximación desde el jazz al tango.
El tiempo demostró que más que un acercamiento entre ambos géneros, Iaies acechaba una nueva forma de lenguaje. Una manera diferente de desarrollar su sensibilidad a la hora de interpretar.
Varios discos, un sinnúmero de giras por el exterior y el paso por varios teatros locales fueron dejando en evidencia lo acertado de su camino.
Cuando parecía que el pianista se ponía cómodo en su papel de jazzman tanguero, dejó ese camino de lado y se volcó de manera integral al jazz y a la composición.
Iaies acaba de lanzar su disco triple Unodostres, solo y bien acompañado , que presentará esta noche, a las 21, en La Trastienda, Balcarce 460, con Ricardo Cavalli en saxofón, Miguel Tarzia en guitarra, Arturo Puertas en contrabajo y Pepi Taveira en batería como músicos invitados.
"Hace cinco años que no grababa y venía de hacer discos con pocas composiciones mías. En realidad, tocaba versiones de otras versiones, así que necesitaba componer; no había hecho nada nuevo", dijo el pianista a modo de inicial explicación durante la entrevista con LA NACION.
Iaies contó que la idea de este disco, que no nació con la expectativa de tener trillizos, era romper con todo lo que había hecho anteriormente.
De ahí también la idea de tocar con otros artistas que le permitieran otro vuelo; nada conocido hasta ese momento.
"Durante un ciclo de dúos en Notorious me junté con Ricardo Cavalli, con Juan Cruz de Urquiza, con Mariano Otero y con Mariana Baraj, entre otros, y fue en esas noches que me decidí a intentar registrar esa interacción que conseguíamos", dijo el músico que, de todos modos, mantuvo como principio rector el disco de solo piano, primer CD de la caja que representa el primer trabajo triple del jazz en la Argentina.
El disco es un tributo al pianista John Lewis, para quien cada nota debía estar justificada,
debía tener un peso propio y un sentido.
En el primer disco está la "Suite John Lewis", núcleo conceptual de esta propuesta.
"Lo grabé en octubre del año último en la casa de Rakel Zone, que tiene el Steinway más lindo que toqué en mi vida.
Llegué ahí gracias a Carlos Melero, productor del disco y quien colaboró fuertemente en la calidad de este trabajo. Después esperé un tiempo y desde allí concebí los otros dos discos, en dúos y en tríos", comentó el músico, que incluyó dos versiones de "My One and Only Love", una en el disco de solo piano y la otra con Cavalli. Sobre este tema y algunos otros hizo especial hincapié. "Sabía que Cavalli podía llegar bien lejos con esta balada", agregó. Respecto de "Nefertiti" señaló que la forma en la que Taveira toca sobre los toms le dio un tono novedoso e interesante.
Y vuelve sobre el punto:
"Mi idea no fue juntar músicos y hacer versiones.
El solo piano es una guía, algo así como el mapa del disco; en los dos restantes trabajo de anfitrión, es decir, doy el espacio a los invitados; de ahí que tuve que elegirlos con mucho cuidado.
Como si alguien fuese a hablar en tu reunión, uno no sólo tiene que quererlo, también tiene que confiar en el orador y quedé sorprendido por el nivel que alcanzamos. Tarzia, Juan Cruz [por Urquiza], Cavalli y Taviera tocaron con un compromiso que es la mayor ventaja que tiene hoy el jazz en la Argentina.
En otros lados, hay muy poco de eso.
Aquí, salvo excepciones, los músicos jóvenes están subidos a este barco", señaló Iaies, quien también fue explícito sobre las modas que atraviesan la escena local.
"Entiendo que todo tiene su tiempo y que, de pronto, aparece la idea de hacer música abstracta, poque lo hacen cabezones como Paul Bley o Fred Hersch, pero la música está en la melodía", explicó y es claro que el pianista hace un dogma de fe de este principio musical:
lo importante es la melodía.
"Seguir lras modas termina por despersonalizar al artista; se pierde el carácter propio, que en este caso afecta al mensaje y su profundidad", dijo.
Sobre su actividad, Iaies mostró que más allá de la dirección artística del sello S Jazz y de ser el programador del festival que el sello efectuará desde el 15 de noviembre en el Metropolitan, abrió la cancha como compositor de música para películas y alguna incursión en música para teatro.
"Es el mejor de los mundos. Hacer música para película es ponerla al servicio de la imagen.
Ahí cuentan los segundos y los minutos, y todo tiene un sentido preciso.
Extenderme en un solo o en una frase disuelve la fuerza de la imagen, deteriora el mensaje y hasta puede distraer al espectador"
, relató el pianista, que hizo la música de Tres corazones , la película dirigida por Sergio Renán estrenada hace unos meses, y la de Regresados , de Nardini y Bernards, los mismos que filmaron 76 89 03 , que se conocerá este año.
En teatro hizo la música para Antes muerto , escrita y dirigida por Moro Anghileri, en la que actúa ella y Carlos Portaluppi, y que se estrenó hace dos semanas en la sala Beckett. En definitiva, un pianista que arriesga y cuya historia muestra que ha ido consiguiendo los mejores resultados.
Por César Pradines
Para LA NACION
http://www.lanacion.com.ar/entretenimientos/nota.asp?nota_id=930785
¿Por qué John Lewis?
A Iaies, siempre lo atrajo John Lewis por la importancia que le daba al uso de los silencios como un generador de tensión musical incomparable.
"Ese uso del silencio tiene un sentido distinto del que uno puede encontrar en Miles Davis, donde hay un juego casi impresionista, o en João Gilberto, en el que se advierte una búsqueda casi minimalista, por ejemplo.
En Lewis tiene más que ver con una especie de obsesión por hablar de una sola cosa por vez y, si hiciésemos una analogía con un escritor, diría que es la correcta utilización de los signos de puntuación, en busca de sacarle a cada frase, a cada palabra el máximo jugo posible", explicó el pianista.
El arreglo que hizo de "Blue Monk" es un homenaje a la versión de "Round Midnight" que Lewis grabó en su Private Concert , uno de los discos de referencia para Iaies, junto con The Garden of Delight (un disco de trío con contrabajo y guitarra).
Link
Adrian Iaies - Las Cosas Tienen Movimiento - 2002
.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario